ninguna empresa debe tener como propósito hacer dinero, pero todas las empresas necesitan hacer dinero para honrar su propósito
(Humberto Rueda)
Introducción:
El Propósito no es la Meta, ni la Misión, ni la Visión. No es un lugar al que queremos llegar. Es una brújula que marca la dirección de nuestros pasos.
A nivel personal, tener un Propósito Inspirador claro tiene un gran impacto en nuestra sensación de Bienestar, ya que, al darle sentido a nuestra vida, nos eleva el Entusiasmo, nos encauza el camino, nos impulsa a acelerar el paso, nos anima a no renunciar y, sobre todo, nos sirve de Guía para nuestras decisiones.
A nivel organizacional, tener un propósito inspirador adoptado y sentido por todos, se convierte en el Faro y Guía de la organización, de los Valores y de la Cultura. Tiene el poder de atraer a las personas afines, generando Orgullo y sentido de Pertenencia, lo cual se ve reflejado en la capacidad para ofrecer a los clientes experiencias que generan Conexión y Lealtad. La claridad de Propósito lleva a las organizaciones a ser más Ágiles y Eficientes e inspira la Innovación, reflejándose en verdadera generación de Valor Social, Bienestar y Riqueza para todos los involucrados.
El Programa Básico:
“El Propósito Organizacional no es algo que las personas tengan que memorizar, es algo que las personas deben sentir en su corazón para vibrar con él” - Humberto Rueda
Este programa está diseñado para Sensibilizar a los líderes de las organizaciones y a las diferentes áreas, sobre el poder de tener una declaración de Propósito que Inspire y Guíe a la organización y para acompañar a los participantes en la construcción de esa Declaración de Propósito que se convertirá en la brújula para guiar en la práctica las acciones y las decisiones.
El programa considera iniciar con el equipo de la Alta Dirección, con el cual se trabajará en la definición del Propósito Superior de la Organización, que se convertirá en la sombrilla que guiará los demás niveles del Propósito, y en la definición del Propósito del equipo de la Alta DIrección, que, aunque diferente al Propósito Superior, deberá ir articulado y consecuente con esta.
A partir de este punto, el programa considera la realización de sesiones con los líderes de las principales o todas las áreas de la organización, con el fin de definir el Propósito inspirador de cada área, los cuales serán particulares a cada una, pero que estarán alineados con el Propósito Superior de la organización.
Estas sesiones se realizan en un orden secuencial, ya que existe una jerarquía del Propósito, comenzando por el de la organización, el del equipo de la Alta Dirección y los de cada una de las áreas.
El Programa de Acompañamiento:
Posterior a estas actividades de Sensibilización y Definición del Propósito, vendrán sesiones de Acompañamiento con los diferentes responsables dentro de la organización, para las fases que siguen , las cuales son:
Comunicar el Propósito a todo el equipo y cómo este se convertirá en la guía que todos seguiremos para honrarlo.
Verificar y Ajustar los Valores de la Organización, que son los ladrillos de la Cultura, de formar que estén alineados y expresados en términos del Propósito
Verificar y Ajustar el Estilo de Liderazgo necesario para honrar el Propósito
Verificar y Ajustar las Características de las personas que buscamos para la organización, de forma que estén alineadas con el Propósito
Verificar y Ajustar los esquemas de Compensación necesarios para que estén alineados con el Propósito
Verificar y Ajustar los Procesos de la organización, para que se encuentren alineados con el Propósito
Verificar y Ajustar los KPIs o Indicadores con los cuales mediremos la ejecución de la organización, de forma que estos estén alineados con el Propósito y expresados en el lenguaje del Propósito
Crear un programa de Comunicaciones Internas para reforzar el Propósito, cómo este se refleja en las acciones del día a día y reconocer las acciones que honren la declaración del Propósito
Programas Complementarios:
Para Honrar el Propósito Trascendental e Inspirador de la Organización y de cada una de las áreas, es necesario que exista una Alineación entre el Propósito Personal y el Organizacional. Esto puede implicar el inicio de procesos de Transformación personal de los líderes y de todos los colaboradores.
En estos casos, acompañaremos a los participantes con programas a la medida para el Reconocimiento y Activación de las Competencias Internas, que son los ingredientes de la Inteligencia Espiritual.
