Tu Capital Social-lo que puedes aprender de esta crisis para fortalecer a tus equipos de trabajo
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Uno de los conceptos que trabajo en Bee On, en los talleres y charlas con nuestros clientes, es el del CAPITAL SOCIAL y, en estos momentos de crisis global, quiero recodarte qué es y cómo puedes aprender de esta situación para regresar a tu empresa fortalecido(a) desde tu interior, para fortalecer también la verdadera esencia que sostiene a tus equipos.
El capital social es ese conjunto de personas con las que compartes metas, valores e intereses. En tu vida tienes muchos capitales sociales: tu familia, tus amigos, el grupo de danzas, tus compañeros de área en tu empresa. De hecho, en el mundo laboral, tu capital social no lo conforman únicamente los miembros de tu área; también lo son los miembros de las otras áreas, toda la empresa en general. Más aún, también lo son todos los que conforman el ecosistema de tu empresa: tus clientes, tus proveedores, el gobierno, las familias de todos los colaboradores y la comunidad cercana.
¡Increíble! ¡Cuántas personas giran alrededor y dependen de tu organización!
Cuando te sales de la perspectiva empresarial y te vas a tu perspectiva social, también puedes reconocer tu capital social. Aquí es donde quiero hablarte de la crisis actual que vivimos a nivel global y qué puedes aprender para que haya valido la pena.
Nunca la humanidad había estado tan unidad alrededor de un interés común; ni siquiera el cambio climático había despertado tanta conciencia. Hoy en día es claro que compartimos un interés común y urgente: erradicar el virus. Es claro que, para lograrlo, es necesario el concurso de todos y que uno solo que no participe, debilita la posibilidad de éxito y de que este sea en el menor tiempo posible, porque hay vidas en juego. Para que esta empresa sea sostenible se necesita del concurso de todos. Además, es importante que todos nos cuidemos a nosotros mismos y que cuidemos a nuestros seres queridos. De hecho, tú necesitas que todas las personas que te rodean estén sanas y les vaya bien, porque su bienestar apoyará el tuyo también. Cada nueva persona contagiada te preocupa y cuando escuchas que se está reduciendo el número de contagios, te alegras. Tú estás bien, pero eso no es suficiente; necesitas que todos estén bien.
Todos estamos pasando momentos difíciles en lo económico, algunos más que otros y en lo emocional también. Estar separados de tus seres queridos y no poder abrazarlos es doloroso. Por fortuna, muchas personas han salido a ofrecer su ayuda de forma no presencial y los gobiernos crean medidas para aliviar el impacto económico de la crisis.
Hace unos días me di cuenta de que estaba reteniendo mis emociones, cuando una canción las destapó y lloré todo lo que tenía que llorar. Se mezclaron en mí el dolor de no poder abrazar a mi familia y a mis amigos, con ver, por primera vez en mi existencia, a todo el planeta unido detrás de una misma causa. Inmediatamente le envié un mensaje a todos mis hermanos, les dije que necesitaba verlos con sus familias, que tal vez ellos también lo necesitaban y les propuse hacer una reunión virtual para compartir juntos, para apoyarnos emocionalmente y para recordar que somos una tribu, que compartimos el ser parte de una gran familia, que somos capital social unos de otros. Tuvimos una reunión hermosa, brindamos juntos, nos contamos cómo estábamos viviendo la cuarentena y cómo esta situación estaba impactando nuestras vidas y nuestros trabajos, celebramos el nacimiento de una nueva miembro y la noticia de la próxima llegada de otro. Somos una familia muy grande, en cantidad y en amor y, saber que puedo contar con ellos y ellos conmigo, me ayuda a pasar este momento. Nos prometimos vernos cuando termine la cuarentena para abrazarnos y brindar y acordamos vernos nuevamente, como forma de cuidarnos entre nosotros, porque es muy importante que todos estemos bien.
Por alguna razón que todos dimos por cierta sin cuestionarlo nunca, el mundo empresarial es, en la mayoría de las casos, una jungla. Muchas personas buscan escalar y ganar, sin importar qué les pase a los demás. Otras personas pasan en silencio momentos difíciles a nivel emocional, sin tener un hombro para apoyarse, porque dan por sentado que a nadie en la empresa le importa lo que les pase.
No es posible que el éxito de una empresa sea sostenible en el tiempo si al 100% de sus miembros no les va bien. De nada sirve que tú tengas un muy buen año y que hayas ganado un bono extraordinario, si a la empresa no le fue bien. Es posible que lo hagas uno o dos años seguidos, pero, si a la empresa no le va bien, la empresa desaparecerá y ya no tendrás la plataforma que te sostiene para lograr tu éxito.
Por eso te quiero proponer que copies y apliques en tu empresa los aprendizajes de la forma como estamos afrontando la empresa de erradicar el virus del planeta:
1. Para que tu empresa sea sostenible en el tiempo, es necesario que a todos les vaya bien. No es posible que tú seas exitoso en tu trabajo si a los demás no les va bien. Celebra el éxito y los logros de los demás. Si lo piensas, te darás cuenta de que esos éxitos son también los tuyos.
2. Cuida y apoya a todos los miembros de tu empresa y cuenta con el cuidado y apoyo de ellos. No somos máquinas humanas; somos seres integrales. Necesitamos cuidarnos, no solo en nuestro desempeño laboral, sino también en todas nuestras dimensiones. A todos nos mueven nuestras emociones, por lo que necesitamos apoyarnos emocionalmente para que nuestros resultados sean mejores y podamos generar riqueza sostenible para todos.
3. Recuerda que, si quitas todos los elementos que conforman la organización, aún quedan las personas, que son la esencia verdadera y lo único importante de las empresas.
En estos días de encierro, llama a tus compañeros de trabajo, pregúntales cómo están y ofréceles tu ayuda. Reconoce que eres parte de su capital social y ellos del tuyo. Cierra los ojos y deséales con tu corazón todo el bienestar posible; envíales tu amor y gratitud por ser parte de tu vida en este momento. Si necesitas ayuda, pídela. Te sorprenderá descubrir cuántas personas en tu empresa están dispuestas a apoyarte. Todos los seres humanos amamos servir y ser útiles para los demás.
Al terminar la cuarentena, cuando te encuentres con tus compañeros, dales un abrazo. ¡Si, un abrazo! Eso que rara vez se ve en las empresas. Sentirás qué rico es contener y sentirse contenido por otra persona, por tu capital social.
Reconócelo, cuídalo, apóyalo, úsalo y disfrútalo. ¡Son tu Tribu!